¿Qué es esto, mamá?
La chica mostraba unos papeles antiguos, impresos por ordenador.
Te tengo dicho que no andes en mis cosas, entre enfado y sorpresa.
No sabía que eran tuyos, los encontré en la buhardilla de la casa vieja, empecé
a leerlos y no pude parar
…Son preciosos, atemporales, se ve que te quería mucho.
¡Mucho! Tardé en entenderlo, era una cría como tú, apenas tenía 30 años.
¿Y qué pasó?
No hubo respuesta, sólo un mohín, un imperceptible gesto, una nube en los
ojos.
¿Cómo acabó?
No hubo respuesta, sólo un mohín, un imperceptible gesto, una nube en los ojos.
viernes, 12 de diciembre de 2008
El dueño de mi secreto
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1 comentario:
Nunca acabó??
Es bonito.
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